Tanto si acabas de confeccionar el mazo definitivo para arrasar en las partidas de Magic, como si estás decidiendo cómo distribuir los puntos de habilidades de tu enano pícaro en Dungeons & Dragons o te estás pensando en qué momento soltar a tus goblins fanáticos para sembrar el caos en Warhammer Fantasy, será necesario que las reglas estén redactadas en todo momento de manera precisa, clara y sin margen de error. La traducción de los manuales para juegos de mesa implica una gran atención al detalle para producir textos que reflejen de manera milimétrica a los originales, sin lugar a ambigüedades, y que a la vez resulten divertidos y elegantes de leer.
El traductor ideal es, como en muchos otros campos, también un usuario del producto. Esto le permite conocer a fondo la dinámica y las diferentes terminologías propias del mundillo, y partir con la ventaja de saber en qué terreno se mueve. Soy jugador de juegos de rol y cartas desde hace muchos años, y yo lo tengo claro: detrás de todo campeón de Warhammer 40 000, hay un traductor que supo traducirle las reglas.